El Sistema Informático de Gestión Administrativa (SIGA) es uno de los sistemas informáticos creados e implementados por el Estado en la administración pública, con el propósito de que podamos ejercer un control en el ámbito presupuestal y logístico del sector público para trabajar de una manera mayormente óptima.
El SIGA fue aprobado por Decreto Supremo a través de la Ley de Contrataciones del Estado por el Ministerio de Economía y Finanzas, por lo que también es correcto conocerlo por el nombre de SIGAMEF, no obstante, su nombre se traduce solo en SIGA.
El SIGA está compuesto de cinco módulos que se denominan: Bienes corrientes, Logística, Patrimonio, Presupuesto por resultados y Tesorería.
Para fines de 2018 el SIGA, al igual que el SIAF se encontraba instalado en la mayoría de las entidades públicas, por lo que desde 2019 serían ambos sistemas de total obligatoriedad de uso por parte de todos los servidores públicos, porque en él se encuentran todos los módulos disponibles y estables para ejercer las funciones competentes.
Cabe destacar que una de las características en gran parte resaltante del SIGA es que puede interconectarse a través de una interfaz con el Sistema Integrado de Administración Financiera (SIAF), lo que permite observar todos los datos asociados a la gestión presupuestal.
¿Por qué es obligatorio el sistema SIGA?
Es importante tener claro de lo que significa el manejo y la importancia del SIGA para el sector público, sobre todo en esta época en la que se han estado cambiando y reforzando valores institucionales como la transparencia, lealtad, eficiencia, eficacia y unificación de criterios, conforme se van enlazando estos objetivos del Estado con la modernización tecnológica.
Además de ser un mecanismo de control para evitar las prácticas ilícitas con el recurso público, también es sinónimo de progreso la implementación de sistemas que nos dan un campo abierto a un catálogo de bienes y servicios autorizados para licitar con el Estado.
Dicho esto, la obligatoriedad en el uso de este programa informático se trata de marcar entre todos un antes y un después, ya que el manejo de este sistema por los servidores públicos disminuye la ineficiencia en los procesos desarrollados.
Al igual que cualquier sistema recrea eventualmente actualizaciones, por lo que sugerimos tomar capacitaciones, si desea consultar por las que ofrecemos sírvase en hacer clic aquí.
¿Cuáles son los beneficios que nos trae?
Además de la transparencia absoluta en los procesos administrativos y logísticos, por su adorable interconexión con el SIAF, también nos otorga una serie de ventajas a nivel estatal:
- Ayuda a mantener el orden dentro de las operaciones desarrolladas por el Estado y sus proveedores.
- Genera un catálogo de bienes y servicios que se encuentra visible a nivel nacional, en donde se pueden consignar los datos necesarios para cualquier evaluación.
- Efectúa mayor transparencia en la ejecución de objetivos, dando más confianza en lo realizado en la gestión de los servidores públicos.
- Sistematiza las compras a nivel corporativo, la generación de información en cuanto a precios y la toma de decisiones dentro y fuera de las entidades.
