Con una visión bastante positiva los economistas peruanos y ligados a la historia financiera de la nación, suscriben que por los momentos no se esperan grandes cambios -para peor- en la productividad del país.
¿Por qué es necesario estimar proyecciones?
Todos lo hacen, el sector privado y los ciudadanos principalmente, pues pese a que no estén ligados directamente al sector público, se mantienen alerta y con interrogantes.
Luego de que el pasado 30 de septiembre, Martín Vizcarra, presidente de la República del Perú, informara la disolución del Congreso de la República, junto al llamado de la población para respaldar la decisión, con una salida a las calles, las alarmas se encendieron desde las diferentes organizaciones y para los mismos ciudadanos.
Con optimismo, piensan que no, sin embargo, otros especialistas opinan lo siguiente:
«(Las empresas) Sí se preocupan y ven un escenario negativo a futuro (de la economía) pero todavía no se traduce en algo para su empresa. Entonces, cuando preguntamos a las empresas no financieras sobre crecimiento (económico), han declarado (que esperan) 3% para este año, 3,5% para el próximo y 3,7% para el 2021. ¿Qué significa eso? Que esperan que su mercado crezca. Si usted espera que su mercado crezca, entonces lo que espera es no posponer esa inversión porque si no la competencia le gana. Me puede dar un poco de temor esto (la crisis política), pero puedo perder más si no invierto ahora»