La comunicación escrita se encuentra inmersa en todos los ámbitos de nuestra vida. Escribimos todos los días, y aunque por la práctica deberíamos ser expertos escribiendo, es todo lo contrario. Pero, ¿realmente conocemos las consecuencias de una mala ortografía en el trabajo?, ¿la imagen que transmiten de tu profesionalismo por los errores ortográficos?…
Existe una gran cantidad de personas que escriben como hablan, suprimiendo los acentos, evitando comas, abrevian de manera errada, y en el peor de los casos, con las letras incorrectas.
En el contexto laboral, estas equivocaciones pueden ser perjudiciales para tu nivel de profesionalismo. No debería haber pretextos ni justificación para no buscar apoyo para mejorar y procurar manejar una buena ortografía.
Tomando en consideración que, la manera en que escribes también puede influir en la imagen de la empresa en la que desempeñas funciones. Los errores gramaticales, de conjugación o de sintaxis constituyen un impacto muy negativo sobre la credibilidad y nivel de seriedad de la corporación que representas.
Es sencillo: ¿cómo confiar en los conocimientos y experiencia de alguien que no sabe escribir correctamente?…
Buscar alternativas para mejorar
Para ello, puedes comenzar con aumentar la cantidad de lecturas diarias, de temas diversos y/o temas de tu propio interés, apoyarte en el diccionario digital de la Real Academia de la Lengua, manuales, ejercicios, y múltiples alternativas que el Internet puede ofrecerte.
A propósito de esto, también puedes participar en nuestro diplomado especializado en Ortografía y Redacción, para potenciar tus prácticas, consultar dudas e inquietudes a expertos, y reforzar tus experiencias en la comunicación escrita. Mayor información del diplomado https://seminariosescuela.com/diplomado-ortografia-y-redaccion-ejecutiva-profesional/
Algunos efectos de una mala ortografía
- Resta profesionalismo e inteligencia.
- Refleja cierta dejadez y falta de seriedad.
- Dificulta la legibilidad, cansa al lector y hasta tiende a confundir.
- Falta de rigurosidad y credibilidad.
- Puede ser un factor excluyente.
- En casos, puede ser considerado como una falta de respeto.