Si habláramos de un presupuesto persé estaríamos ligándolo de una buena vez a lo que implican las planificaciones dentro de cualquier organización, por lo que la eficiencia al momento de producir en función de determinados objetivos nos llevan de una manera u otra a mantener cierto control presupuestario.
Desde siempre se ha conocido que los presupuestos forman parte del ámbito de la administración público, porque estos son los que permiten conocer cuánto se requiere invertir desde un punto de vista económico en toda la nación, desde sus diferentes aspectos.
Dentro de la gestión pública, conocer de control presupuestario es totalmente necesario para poder condensar el equilibrio que se presenta en los diferentes aspectos de la organización, especialmente en lo que respecta al ordenamiento.
Control presupuestario
De acuerdo al sitio web Economipedia, el control presupuestario es:
El control presupuestario son todas las actividades encaminadas a equilibrar las cuentas de ingresos y gastos de una organización.
Se trata de mantener una vigilancia pertinente con respecto a las cuentas de ingresos que pertenecen a las entidades, de esta forma podremos realizar diferentes actividades, como por ejemplo el control más estricto en los diferentes aspectos planificatorios ligados al presupuesto existentes.
Cuando se realiza este tipo de controles se puede hacer una comparación entre los presupuestos de años anteriores, para conocer a cabalidad de qué manera se ha invertido el dinero y cómo ha podido colocarse positivamente en lo que a intereses productivos de la empresa se respecta.
Por otra parte el mismo control presupuestario permite a las organizaciones tomar decisiones acertadas para evitar dañar la productividad o también cohibirse de algunos cambios que bien pudiesen hacerse. Podemos bien contar con un presupuesto flexible en diferentes aspectos o también contar con un extremo límite al momento de invertir, ejecutar prioridades y disminuir gastos de segunda índole.